Este mes Toni de Contes per crèixer, comparte con nosotros la historia de un caracol soñador ¿Te unes a nosotros a leer este cuento? Recuerda que puedes descargarlo para poder leerlo más cómodamente con tu hijo en cualquier lugar o momento del día.
Edad recomendada para este cuento:
A partir de los 2 años.
Por qué debes leer este cuento a tus hijos:
Los animales son muy atractivos para los niños y niñas de 2 años de edad. Por eso, si tu hij@ tiene entre 2 y 3 años disfrutará leyendo la historia dea “El Caracol Friolín”.
Recuerda que antes de leer el cuento a tu hijo/a debes leerlo tú en voz alta. Poco a poco, con tranquilidad, vocalizando correctamente y realizando las entonaciones necesarias.
Si el texto contiene alguna palabra de la que no conoces el significado debes buscarlo. También has de prever aquellas palabras que intuyes que tu hijo no conoce para que le puedas explicar su significado, como, por ejemplo, la palabra amapola: si le enseñas una imagen (fotografía, dibujo…) enseguida conocerá lo que es.
Puedes utilizar este cuento para poder hacer preguntas sobre ellos y te darás cuenta de la capacidad que tiene tu oyente de retener y recordar lo que ha escuchado. Este ejercicio es muy interesante y necesario ya que nuestra sociedad es muy visual y, en muchas ocasiones, no potenciamos la retención y el valor de los mensajes orales.
EL CARACOL FRIOLÍN
Había una vez en un país donde los pájaros hablaban… vivía un pequeño caracol. Los otros animales del bosque como los conejos, los ratones silvestres, las luciérnagas, los pajaritos cantores… lo llamaban Friolín ya que siempre tenía frío.
Un día, Friolín decidió ir a la feria a comprar unos zuecos pero, claro, como caminaba tan poco a poco, cuando llegó las paradas de zapatos ya estaban cerradas. ¡Qué remedio! Tuvo que volver atrás, hacia su madriguera. Tenía tanto sueño y estaba tan cansado que se quedó dormido bajo un matorral de hierba fresca y verde.
Al día siguiente, Friolín se despertó con mucha energía. Había soñado la manera de construir una casita y llevarla siempre encima. De esta manera cuando estuviera cansado se pondría a dormir dentro de su morada. En caso de que un día lloviera se podría cobijar dentro de su propia casita que llevaría encima.
Y debéis saber y creer y, creer y saber, que en un santiamén, se construyó su casita y se la puso encima para siempre. Friolín se sentía muy contento y orgulloso de su obra. Se la cargó encima y decidió ir a ver el agujero por donde sale el sol, sin embargo, esta aventura que es un poco larga de explicar tal vez alguien os la contará en otra ocasión.
Y CUENTO LEÍDO,
EL CUENTO DEL CARACOL FRIOLÍN
SE HA ACABADO
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