Cuando nace nuestro primer hijo él se siente como si fuera el rey de la casa. Todas las miradas, sonrisas, caricias… van hacia él. Le gusta acaparar la atención de sus papis y también de todo aquel que tiene cerca.
El problema puede surgir con la llegada de un hermanito pequeño, y es que todos los lujos que tenía él, pasan a ser para el bienvenido. Los hijos mayores a veces se sienten desatendidos o poco mimados, ya que un recién nacido requiere de más atención. Los papis nos tenemos que encargar de que nuestro hijo mayor acoja de la mejor manera a su hermanito, ¡ya que lo terminará queriendo y cuidando más que a nadie!
Consejos para ayudar a tu hijo mayor con la llegada de un hermanito
Prepara a tu hijo con la llegada de un hermanito
Antes de todo se tiene que informar a tu hijo de la llegada de un hermanito. Se le tiene que explicar con palabras adecuadas para su edad que dejará de ser hijo único y que tendrá la responsabilidad de cuidar a un bebé, que será su hermano pequeño.
Seguramente el niño estará contento con la llegada de un hermanito para poder jugar con él. Mentalízalo de que durante sus primeros años de vida, se pasará la mayor parte del tiempo comiendo, durmiendo o llorando. Así pues, aún no estará preparado para ser su compañero de juego hasta pasado un tiempo.
Puedes ayudarte de vídeos y audiolibros infantiles que le explicarán a la perfección a tu hijo que supone la llegada de un hermanito
Organízate para poder pasar tiempo de calidad a solas con el hermano mayor
Un bebé recién nacido requiere de mucha atención pero no se puede menospreciar al hijo mayor, ya que sigue requiriendo de la atención que tenía antes de la llegada de un hermanito.
Lo óptimo sería que los padres os organizarais vuestro tiempo para atender las necesidades del recién nacido, pero también tenéis que pasar tiempo a solas con vuestro hijo mayor, igual que hacíais antes de la llegada del nuevo hijo. De esta manera, él no se sentirá desatendido ni sentirá celos de la atención que le tenéis a su hermanito.
Dejar que te ayude un poco, sin pedirle que se comporte como un adulto
Antes de la llegada del segundo hijo puedes pedir a tu hijo mayor que te ayude a preparar la habitación o a comprar ropita o juguetes para su hermanito. Lo básico es que te ayude, a medida de lo posible, a preparar la casa para su llegada.
Aún así, tienes que tener en cuenta que no deja de ser un niño, y no le puedes exigir lo que le exigirías a un adolescente o a una persona adulta. Deja que colabore para que se sienta integrado a la familia, pero no le pidas más de lo que puede ofrecer, ni lo regañes si alguna cosa no le sale como te gustaría.
Aceptar el comportamiento regresivo pero no lo fomentes
Tu hijo mayor podría romper vuestras reglas para intentar llamar la atención, aunque sepa que las consecuencias serán perjudiciales para él, como podría ser una bronca o un castigo. Para tratar de poner fin a este comportamiento, felicítalo cuando se porta bien.
Si crees que tu hijo se porta mal para llamar vuestra atención, trata de ignorar este comportamiento, para que él vea que no está logrando su objetivo. Esto podría incentivar a tu hijo a buscar una alternativa más positiva para llamar vuestra atención. Lo primordial es hablar con vuestro hijo mayor, hacer que se sienta atendido, y sobretodo preguntarle cómo se siente con la llegada de un hermanito. Es importante saber los sentimientos que tiene vuestro hijo respecto al recién llegado.
¿Cómo puedo motivar a mi hijo mayor para que sea bueno con su hermanito?
Algunas veces los hijos mayores, que están viendo como todo a su alrededor está cambiando, descargan su frustración con su hermanito. Cada uno tiene una manera diferente de aliviarse, y nos podemos encontrar con que le habla mal, pasa de él, le esconde juguetes, o incluso podría hacerle daño.
Si ves que se está dando esta situación, tienes que prestarle más atención a tu hijo mayor, tratando de incluirlo en las actividades o tareas que requiere el bebé, como darle de comer, bañarlo o leerle un cuento para que se duerma. Felicita a tu hijo mayor cuando trate con cariño y a su hermanito.
Incluso si los dos se llevan bien, es necesario supervisarlos, sobretodo si tu hijo mayor es menor de 12 años. Aunque no hagan nada malo expresamente, un niño pequeño puede tener cualquier despiste que puede traer graves consecuencias. Así pues, no dejes solo al bebé si tu hijo mayor aún es tan pequeño.
¡Atención a lo que dices!
Los niños lo escuchan todo, y tienen la costumbre de repetir todo lo que dices, especialmente las palabras malsonantes. Tienes que tener mucho cuidado con lo que dices cuando tu hijo mayor está cerca, ya que si te oye decir alguna palabra que no deberías, este la repetirá allí donde vaya, ya sea en el colegio, con sus amigos en el parque, o a su hermanito recién nacido.
Prepara un rincón especial para el mayor de la casa
Los niños como más mayores se hacen, más espacio para ellos mismos necesitan. La llegada de un nuevo miembro a la familia supone muchos cambios, tanto para los miembros de la familia como para el propio hogar. Los juguetes y objetos de cuidado del bebé se reparten por toda la casa y el hijo mayor se puede sentir invadido o sobrepasado.
Sería óptimo prepararle un sitio de juego o estudio, dependiendo de la edad que tenga, para que disfrute su intimidad, sin tener la necesidad de estar todo el tiempo en espacios compartidos con su hermanito.
¿Qué os ha parecido este post? Os habéis encontrado en alguna de estas situaciones? Necesitas ideas originales para anunciar la llegada de un segundo hijo?
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